¿Lavado verde o poderl del consumidor? ¿Por qué necesitamos el ecoetiquetado?

En la actualidad, hay cientos de etiquetas ecológicas más o menos fiables que certifican desde el papel higiénico hasta el biocombustible. Los consumidores europeos, en particular, seleccionan etiquetas ecológicas que les permiten elegir productos sostenibles cuando compran cacao, muebles de madera u otros productos derivados de la silvicultura, la agricultura u otras formas de uso de la tierra.

El término genérico «etiqueta ecológica» tiene su origen en los primeros tiempos de las normas sobre etiquetas ecológicas, que se centraban principalmente en la ecología, las cuestiones medioambientales y la salud. Muchas de esas etiquetas siguen existiendo, pero hoy en día la mayoría de nosotros somos conscientes de que, a menudo, los productos que consumimos pueden ir asociados a muchos otros temas más.

Producir verduras sin pesticidas perjudiciales para la salud tiene mucho sentido, pero ¿son realmente sostenibles los productos cuando los trabajadores agrícolas no han recibido un salario digno para vivir?

Creeemos que no. 

Preferred by Nature favorece un enfoque holístico: Desarrollado por nuestros auditores de campo y expertos en sostenibilidad durante casi una década, el sistema de certificación que respalda nuestro Sello del Colibrí es quizás el más completo del mercado, ya que incluye indicadores de biodiversidad y aspectos sociales y económicos.

Al abordar los retos sostenibles sobre el terreno y en las cadenas de suministro, las etiquetas ecológicas pueden mejorar la probabilidad de que los productos y las materias primas tengan un impacto positivo en las personas, la naturaleza y el clima.

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• En la actualidad existen 465 etiquetas ecológicas en todo el mundo; según el Eco-Label Index, 231 son europeas.
   
• Las etiquetas ecológicas se basan en el aseguramiento, un sistema de indicadores que los productores tienen que adoptar para hacer «declaraciones» sobre sus productos.
   
• Los productos con ecoetiquetado se venden a un precio más alto -con una prima- para cubrir el uso de normas de producción más sostenibles.
   
• A veces se critica a las etiquetas ecológicas por ayudar a las empresas a «maquillar de verde» productos insostenibles. Sin embargo, son sistemas voluntarios y se basan en la buena voluntad de las empresas que desean invertir en ellos. Por lo tanto, ninguna etiqueta ecológica puede ser una garantía, sino sólo un indicador de buena voluntad, que puede no estar siempre presente.
   

El Sello Preferred by Nature le permite demostrar el compromiso que su organización tiene con las prácticas sostenible. Significa que sus productos apoyan la gestión forestal o agrícola que respeta a las personas, la naturaleza y el clima. Conozca el potencial del sello.